Uno de ellos es limítrofe con el municipio de Ciempozuelos, al que se accede a través del Camino de Oropesa. El otro está junto al paraje denominado Blancares, entre la autopista de peaje R-4 y la carretera M-404, en las inmediaciones del parque de maquinaria de la empresa Dragados.

PLACAS DE FIBROCEMENTO

Según el portavoz de la organización, Julio Martín, buena parte de estos vertidos clandestinos están invadiendo parcelas agrícolas, en las que "no sólo se acumulan residuos inertes sino desechos de origen industrial y placas de fibrocemento, material cancerígeno prohibido por la ley por contener amianto" y sobre cuya retirada tienen competencias directas los ayuntamientos por afectar a la salud pública. Martín ha relatado que hay "incluso restos de carreteras y obras públicas" en estas zonas que "ni siquiera están señalizadas" ni preparadas o autorizadas para albergar este tipo de desechos.

Los ecologistas reclaman la eliminación de estos dos vertederos ilegales y la restauración ambiental de la zona, además del traslado de los residuos para su valorización a una planta de reciclaje de RCD, previa separación de los restos que contengan amianto y su tratamiento adecuado como residuos peligrosos.

PIDEN RESPONSABILIDAD

Fuentes municipales del Ayuntamiento de Valdemoro ya señalaron que se han dado instrucciones a la empresa concesionaria del servicio de limpieza viaria y recogida de basuras para trabajar en la zona, aunque recuerdan que se trata de vertidos ilegales procedentes de ciudadanos que no cumplen con la normativa vigente, por lo que desde el Ayuntamiento hacen un llamamiento a la responsabilidad de todos para evitar que se produzcan más hechos de este tipo.